Una de las habilidades críticas de un auténtico líder es anticipar potenciales conflictos, para evitarlos a tiempo, ahorrando el innecesario desgaste. Un conflicto, generalmente, surge de intereses confrontados o contrapuestos entre dos o más partes. Si el conflicto no se resuelve de una manera racional, consensuada, diplomática y a tiempo, éste tenderá a fortalecerse y consolidarse, mientras las partes involucradas emprenderán acciones de defensa, para protegerse y neutralizar daños, a la vez que iniciarán acciones de ataque para generar perdidas, daños o eliminar a la otra parte.
El líder debe comprender que el conflicto es inherente a la dinámica y condición humana y social, ya que múltiples y variadas perspectivas sociales, históricas, culturales y de todo tipo dan cabida al conflicto. Sin embargo, muchos conflictos surgen de equivocadas percepciones e interpretaciones o de deficiencias en procesos de comunicación. Aunque -sin duda- existen conflictos donde están presentes raíces culturales, religiosas, ideológicas y filosóficas profundas, y en los cuales el respeto y apertura mental del líder juega un rol importante para evitar o resolver los conflictos. Sigue leyendo El líder debe reconocer el conflicto real o potencial para resolverlo, ya que al desconocer u ocultar el conflicto solo lo estará incubando. Miguel A. Terán